El artículo de la Bióloga Eliana Flores, muestra su
inquietud y preocupación por un proyecto energético que afecta a la Laguna
Colorada y que beneficiaría en un 57% a la mina San Cristóbal. El préstamo para dicho proyecto vendría del país Nipón, que
con dicha inversión estaría beneficiando a la empresa japonesa Sumitomo,
propietaria de la mina San Cristóbal.
La Bióloga boliviana, nos previene sobre el impacto
ambiental y pérdida de la biodiversidad en esa zona. El costo-beneficio de este
proyecto lo estaríamos pagando nosotros los bolivianos y nuestras, futuras generaciones,
al tomar en cuenta que en el país tampoco existe un control sobre la
contaminación de la minería. Después de algunos desastres como la contaminación
del Pilcomayo, un problema que como se sabe no tomó en cuenta estudios
que indicaban que las aguas podrían estar contaminadas. Nosotros debemos estar
conscientes del poco control ambiental, de la forma abusiva en la que se extraen los minerales y que esas
extracciones, no benefician a la población.
Ese nuevo proyecto pesaría al país entero y nuevas generaciones, pues se trata de
una zona poco poblada que en un futuro podría atraer un turismo ecológico y podría contar de
energías limpias y renovables, como la energia solar o eolica.
Evitemos echarle la culpa al Japón por invertir en algo que
seguramente le traerá beneficios, debemos darnos cuenta que son nuestras
autoridades que están pensando y pidiendo realizar un proyecto energético que evidentemente
será un proyecto en desmedro de áreas protegidas y sin ningún beneficio interesante
para esas poblaciones locales…
Comenzar a hablar del Japón y Fukushima, esta vez no viene
al caso. Ese país estaba preparado para hacerle frente a los terremotos como
ningún otro y fue un tsunami, o mas bien la combinación de ambos desastres naturales
que causaron un gran desastre nuclear, que es otro tipo de energía y otro tipo desastre ambiental . Sin
embargo, no es un caso aislado y tampoco es difícil imaginar qué impacto tendrá a largo plazo en Japón y
sobre la salud de sus habitantes. Podríamos volver a mirar el desastre de
Chernóbil, mirar por ejemplo los problemas de cáncer mutaciones, problemas de
tiroides y otros…
Es importante resaltar que esa catástrofe ha forzado a Japón
a hacer una revisión completa de sus políticas energéticas y medioambientales. Los
países desarrollados en todo el mundo, actualmente piden volcarse a nuevas
energías limpias, mientras nosotros los países en desarrollo estamos con una
visión retrograda de lo que llamamos futuro…
Eliana también recalca que en el vecino país de Chile una planta geométrica ya colapsó. Podemos aportar que los habitantes y autoridades, allí no se fían más de proyectos de esa naturaleza.
Los bolivianos podríamos implementar energías sostenibles y renovables como el resto del mundo. Tenemos la oportunidad de dejar de inclinamos a
las energías complejas, muchas veces obsoletas, insostenibles e innecesarias para nuestra
demografía..
Japón es un país culturalmente rico que nos podría ayudarnos
por ejemplo a desarrollar agriculturas sostenibles, encaminadas a fomentar una gastronomía
tan variada como la suya.
Aportar a Bolivia con saberes y sabores, esos son los
proyectos que debemos buscar concretizar y favorecer.
Mujeres Sin Miedo
Vocabulario:
Energía Geotérmica: Que se obtiene mediante el aprovechamiento del calor interno de la Tierra.
Energía Termoeléctrica: Es una forma crear energía a partir de la energía liberada en forma de calor, usando la combustión de combustibles fósiles como el petroleo, gas natural o carbón, emite vapor de agua.
Energía Nuclear: El una forma de crear energia a partir del calor que se obtiene de la fisión de núcleos de uranio, contribuye al calentamiento global al emitir vapor de agua y genera desechos radioactivos.
Nota: La energía nuclear por fusión nuclear sería la mas limpia, pero todavía la humanidad no alcanza a desarrollarla a gran escala.
Préstamo vergonzoso
Miércoles, 13 de agosto de 2014
Pagina Siete
Eliana Flores Bedregal
La Agencia de Cooperación del Japón (JICA) ha concedido al
Gobierno de Bolivia un préstamo de 24,5 millones de dólares (495 millones de
yenes) para el proyecto geotérmico Laguna Colorada, que consiste en la
construcción de una planta que genere energía eléctrica de las aguas termales
que brotan en Sol de Mañana, ubicado en la cuenca de la Laguna Colorada,
provincia Sur Lípez del departamento de Potosí.
El 57% de la energía eléctrica generada por la planta será
utilizada por la mina San Cristóbal, de propiedad de la empresa japonesa
Sumitomo, y el resto será interconectado al sistema nacional.
En artículos anteriores mencioné que el impacto ambiental de
esta planta es enorme, irreversible e injusto para las futuras generaciones que
tienen el derecho de disfrutar un paisaje de insondable belleza y de los
flamencos endémicos, en peligro de extinción, anticipando su desaparición con
este proyecto.
Mencionaré brevemente que no solamente la construcción de la
planta significa el deterioro de los volcancitos como atractivo turístico
singular, sino también que toda la región será impactada por el desequilibrio
en el ciclo del agua en esta zona desértica, principalmente la Laguna Colorada,
único sitio de nidificación de la parina chica (Phoenicoparrus jamesi).
Este factor, sumado a la construcción del albergue de los
empleados, más de 500 personas en la orilla, significa elevados niveles de
contaminación de aguas servidas, ruido de camiones y molestias de las personas
que, entre otras actividades, se bañarán en las aguas termales, ensuciando las
aguas donde beben los flamencos.
No faltarán niños tirando piedras a los animales, ni
cazadores furtivos o escapadas para recolectar huevos en la colonia de
nidificación; mientras los guardaparques, que no son muy activos de por sí,
nada podrán hacer frente al "interés nacional” de este proyecto, que
aparece bajo la carátula de "diversificar nuestra matriz energética” como
prioridad nacional. Aunque la presencia del personal pueda ser temporal, el
impacto sobre este ecosistema frágil será irreversible.
En otro artículo también mencioné que los países de alto
desarrollo industrial, como el Japón, tienen huellas ecológicas que exceden sus
fronteras y las aumentan financiando
proyectos de "desarrollo” en países como Bolivia, que acepta préstamos
vergonzosos para favorecer empresas extrajeras, cuyos beneficios son para los
japoneses y no para los bolivianos, así, nuestros hijos no sólo asumirán el
costo ambiental, sino deberán pagar esa deuda, por el "beneficio” de
"diversificar la matriz energética”.
Ciertamente, la región de los Lípez es la más despoblada del
país y la energía solar satisface sus necesidades energéticas.
El Gobierno menciona que será la primera planta geotérmica
en Sudamérica como algo positivo y de vanguardia, pero resulta que en Chile, a
escasos 40 kilómetros del lugar, ya se construyó una planta geotérmica en el
Tatio, la planta colapsó y la inversión se perdió. ¿Qué garantías tenemos de
que la planta geotérmica en Sol de Mañana no colapsará irremediablemente?
Parece que los bolivianos como los japonenses no somos
previsores y el desastre nuclear de Fukushima -calificado a nivel 7 similar al
de Chernóbil- parece ser la desafortunada prueba de ese comportamiento.
Fotografía: Tomada de Web
0 comentarios:
Publicar un comentario